Hiper, hipo?! No, thanks God!

En la vida me había percatado de unas glándulas que están en mi cuello hasta hace poco. Hace como dos meses sentía una presión en el cuello, como si me estuvieran ahorcando, una presión especialmente en la garganta, por lo que creí era una faringitis (no tengo amígdalas yey!). En realidad lo era, mami me puyó (que raro!) y adiós dolor de garganta... Pero persistía la presión.

Varias personas en los últimos tres o cuatro años me han dicho que mi cuello es demasiado grueso para mi contextura física, que me chequee, que blablabla....

Como me sentía bien, no hacía caso... Hasta que esa presión sobre mi garganta seguía... Ma decidió hacerme una sonografía para luego ir al endocrinólogo y me mandaron a hacer un estudio más específico para las glándulas tiroideas: una gammagrafia. Salí con las tiroides demasiado grandes, entiéndase, bocio y la Dra. decidió medicarme...

Adiós libertad! Ya estoy vieja! Dios quiera que esto no vaya a parar ni en hipo ni en hipertiroidismo... Si usted siente una molestia en el cuello, como que el cuello le quiere cortar la faringe en dos o engorda o pierde peso bruscamente sin motivo alguno, por favor vaya al endocrinólogo, este es un asunto muy delicado.

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